Margarita

No era de muchas palabras, mucho menos de querer expresar abiertamente sus sentimientos. Sin embargo, al ver esas flores tan sencillas y a la vez tan significativas, él creyó que sería la mejor manera de demostrar lo que sentía. Además, el ser capaz de mirarla a los ojos y no sonrojarse para no perder la compostura lo hacía temblar enormemente. Mas, si tan solo pudiera entregarle esas flores, al menos de esa manera podría demostrarle que él tenía esperanzas que algún día le correspondiera en sus sentimientos…

Sin embargo, al verla ahí, al lado de su mejor amigo, supo que sus esperanzas eran vanas, ya que el amor que ambos profesaban iba mucho más allá de sus límites naturales y él no tenía espacio en aquel amor.

Así, Kain Highwind dejó caer su ramo y partió sin mirar atrás, con su corazón roto, dejando que Cecil y Rosa siguieran su romance